EL SOBREPESO Y OBESIDAD SON ENFERMEDADES QUE DEBEN SER TRATADAS INTEGRALMENTE

Por: L. N. Dalila García Cruz

Una y otra vez, ¿has seguido infinidad de dietas tratando de disminuir esos kilos que te sobran? ¿Te has preguntado porque algunas veces logras tu objetivo pero vuelves a recuperar esos kilos perdidos?

Quizá las razones sean múltiples, pero en la mayoría de los casos es porque el sobrepeso y obesidad no se ‘ataca desde todos los ángulos’, que nos permita generar cambios en nuestros hábitos para impactar positivamente a nuestra salud.

El sobrepeso y obesidad son enfermedades de origen multifactorial (múltiples factores):

- Factor genético: “A pesar de que no se ha encontrado aún un marcador genético específico de obesidad, existen algunos estudios que han intentado determinar la importancia del componente genético”¹

- Factor endocrinológico: Solo una mínimo porcentaje (2 a 3%) tiene como causa de la obesidad alteraciones endocrinológicas como hipotiroidismo, síndrome de Cushing, ovario poliquístico.

- Fármacos: Algunos medicamentos utilizados frecuentemente causan aumento de peso.

- Factor socioeconómico: Aun no se tiene totalmente estudiado la causa de la influencia sobre el peso, pero se ha observado que en algunos países desarrollados la incidencia de la obesidad en mujeres de nivel socioeconómico bajo es casi el doble que las de nivel socioeconómico alto.

- Factor ambiental: Entre ellos se destacan el aumento en la ingesta energética (ya sea por consumo de alimentos con mayor densidad energética o por aumento de la ingesta de alimentos), reducción de la actividad física, sedentarismo, presión social y comercial, desconocimiento de conceptos básicos de alimentación y nutrición, alteraciones psicológicas causadas por el ‘mundo moderno’.

Éste último factor, factor ambiental, es el que más influencia tiene sobre los casos de sobrepeso y obesidad.

Entonces ya sabemos que la obesidad puede tener como origen varios factores, por lo tanto su tratamiento también debe ser encaminado al abordaje de todos éstos factores. El tratamiento integral o multidisciplinario* no deja de lado ninguna de éstas áreas profundizando en todas para lograr la recuperación de la salud.

Tratamiento médico: El médico será el único personal de la salud facultado para prescribir medicamento (tratamiento farmacológico) y quirúrgico en los casos que se requiera²

Tratamiento nutricional: La participación del nutriólogo comprende la valoración nutricia (evaluación del estado nutricio mediante indicadores dietéticos, antropométricos, pruebas de laboratorio y estilo de vida), plan de cuidado nutricio (elaboración del plan de alimentación, orientación alimentaría, recomendaciones dietéticas) y control (seguimiento y reforzamiento de acciones). El plan de alimentación SIEMPRE debe ser INDIVIDUALIZADO, acorde a las características específicas de cada paciente²

Tratamiento psicológico: Comprende la modificación de hábitos alimentarios y apoyo psicológico. Y en casos que se requiera referir con psiquiatra²

Rehabilitación física: El objetivo del fisioterapeuta y/o entrenador personal capacitado es el control o reducción del aumento de peso a través de la actividad física y la educación.

Entorno, conductual: El ser humano posee tres áreas de la conducta, cognitiva, psicomotora y socio-afectiva, los cuales deben ser tratados mediante grupos de apoyo. La terapia grupal, ayuda a descubrir el verdadero problema de la obesidad: el exceso, la falta de medida, la compulsión y el llenar vacíos, producto de una cultura que alienta la sobre estimulación y el éxito rápido e inmediato. Estos grupos de apoyo como comedores compulsivos anónimos son de gran soporte en la recuperación de los pacientes con sobrepeso u obesidad.

Como puedes darte cuenta la alimentación es una parte del todo, por ello y ocupados en ‘atacar’ verdaderamente el problema de salud, Nutri-figura te ofrece pláticas de apoyo, donde se abordan las diferentes áreas con especialistas capacitados. Pregúntanos por estas pláticas.

* Tratamiento integral: Se le llama al conjunto de acciones a realizar que derivan del estudio completo e individualizado del paciente obeso, incluye el manejo médico, nutricio, psicológico y régimen de ejercicio, que conducen principalmente a un cambio conductual en beneficio de su salud².

Bibliografía:

1. Ferato. Com. Obesidad. http://www.ferato.com Fecha de consulta: 15 de julio de 2011.

2. NORMA Oficial Mexicana NOM-174-SSA1-1998, Para el manejo integral de la obesidad.

VACACIONES DE VERANO: RIESGO LATENTE PARA EL AUMENTO DE PESO

“Investigaciones revelan que los niños aumentan de peso dos o tres veces más rápidamente en las vacaciones que durante el año escolar”

Durante el periodo de vacaciones la rutina de los niños suele ser menos estricta, con horarios más flexibles, los horarios de alimentación cambian, hay más tiempo libre que regularmente se utiliza para ver televisión, juegos de video, pasar más tiempo frente a la computadora… actividades sedentarias, disminuyendo la actividad física y por su puesto, también aumenta la cantidad de bocadillos que se consume.

Lo más habitual es que el desayuno se ‘salte’, picotear entre comidas, hacer comidas rápidas de alto valor calórico y poco nutritivas.

Es normal que los niños aumenten de peso, pero no tan rápido y en periodos de tiempo tan cortos: Éste problema se vuelve más alarmante ya que 1 de cada 4 a 5 niños es obeso y uno de cada 3 esta en riesgo de serlo.

Por ello, es fundamental mantener la estructura en la rutina del niño, manteniendo los horarios fijos para su alimentación y actividades físicas recreativas. En las vacaciones, la rutina se pierde comenzando con los horarios para dormir y levantarse temprano; y por consiguiente también se alteran las demás actividades, como son las horas de las comidas, tiempo de tareas o repaso escolar, tiempo para entrenamientos o actividades físicas, etc. y por consecuencia, eso tiene repercusiones directas e inmediatas en el peso de los niños, así como negativas para su futuro.

Es imprescindible contar con rutinas establecidas y en periodos de vacaciones ser ‘un poco más flexibles’ ya que esto le provee de seguridad, autocontrol y autoestima, al niño contribuyendo a su formación.

Por ello, en éstas vacaciones veraniegas no se olvide de su rutina, no tiene que ser aburrida, pero si saludable. Aquí algunas sugerencias para planear unas vacaciones sin kilos de más.

Mantenga un horario fijo para las comidas. No saltarse ninguna (especialmente el desayuno) y evitar picar entre comidas. Los horarios hay que mantenerlos fijos y adaptarlo a cada uno, repartiendo los alimentos en 4 o 5 tomas durante el día y no concentrarla en uno o dos momentos.

Tenga a la mano solo alimentos nutritivos. Los tres ingredientes que hay que reducir en general en las comidas son la grasa, azúcar y sal. Evite a toda costa dar a los niños golosinas, chicharrones o papas fritas. En cambio, ofrézcales frutas, jugos, verduras, cereal bajo en azúcar, y si los niños quieren una botana, prepáreles palomitas de maíz porque son más saludables y contienen menos grasa; también puede darles yogur o fruta fresca.

Mantenerse activos. Realizar todos los días lo más posible actividades como pasear a la mascota, jugar activamente, ayudar a las labores de la casa. Incluya por lo menos una hora de ejercicio físico al día.

Limite el tiempo de televisión y videojuegos. Dentro de su planeación destine dos horas al día (máximo) para estas actividades. Tampoco permita que los niños ingieran sus alimentos y vean televisión ya que esto provoca mayor consumo de alimentos o distracción de los niños.La hora para actividades educativas. Como leer algún cuento, hacer alguna manualidad que al niño le agrade, repasar lecciones de la escuela, etc.

Beber de un litro y medio a dos litros de agua al día. Ofrezca solo agua a los niños, para darle más sabor puede añadirle fruta, jamaica, limón o naranja. Evite darle a los niños refrescos o bebidas azucaradas.

Tenga frutas y verduras listas para comer en el refrigerador. Así cuando los niños sientan hambre, podrán servirse ellos mismos algo refrescante y nutritivo.

Comidas fuera de casa. En cuanto a este ‘delicado punto’ le sugiero huir de los menús infantiles, regularmente son de alto contenido energético y no incluyen frutas ni verduras. Mejor pida raciones más pequeñas para sus hijos del menú para adultos.

¡Felices vacaciones de verano!